Convertir tu vehículo a GLP es una de las opciones para reducir las emisiones contaminantes, con el objetivo de poder acceder a las ZBE (Zonas de Bajas Emisiones) o ciudades con restricciones medioambientales, ahorrar en costes de combustible y/o obtener la etiqueta ECO. Sin embargo, no todos los vehículos son aptos para este tipo de conversión.
Tipo motor
Para que un vehículo sea adecuado para la conversión a GLP, debe tener un motor compatible con los sistemas de conversión disponibles en el mercado. Los motores más adecuados para la conversión suelen ser los de inyección directa, los turboalimentados y aquellos en los que su estado original ya tienen buena eficiencia de consumo y bajas emisiones.
Para microhibridar tan solo es necesario que el vehículo:
- Cumpla con las normativas de emisiones Euro 6 o posteriores.
- Cuente con tecnología SCR (Selective Catalytic Reduction) para reducir las emisiones de óxidos de nitrógeno.
- Incorporar filtros avanzados que minimicen las emisiones de partículas.
El motor debe estar en buenas condiciones mecánicas. Un motor con alto kilometraje o con problemas mecánicos no es ideal para convertir a GLP.
Para convertir a GLP es conveniente que el tamaño medio del motor sea de 2.0 litros o más, dado que ofrecen un buen equilibrio entre eficiencia y potencia. Nuestro sistema Hybrit no discrimina motores en tal sentido.
Marca y modelo
No todas las marcas y modelos de vehículos son compatibles con la conversión a GLP,
es importante que investigues si tu marca y modelo ha tenido alguna conversión de diésel a GLP exitosa ya que algunos modelos de vehículos han demostrado ser mejores para este proceso. En Hybrit aún no se nos ha resistido nada.
¿Cómo se convierte un coche a GLP?
La conversión de un coche a GLP es un proceso técnico que implica la instalación de un sistema adicional para que el motor pueda funcionar con una mezcla de combustible fosil y GLP, o exclusivamente con GLP. Este proceso debe ser realizado por profesionales calificados para garantizar la seguridad y eficiencia del vehículo.
Existen dos tipos principales de sistemas de conversión
Sistema Dual-Fuel.
Permite que el motor funcione con una mezcla de combustible y GLP. El GLP se inyecta junto con el aire de admisión, mientras que el combustible se inyecta en menor cantidad para iniciar la combustión.
Modifica el motor para funcionar exclusivamente con GLP, eliminando el uso de combustible
La instalación del sistema de GLP incluye varios componentes necesarios:
- Tanque de GLP. Se instala un tanque de almacenamiento de GLP, generalmente en el maletero del vehículo (restando un importante espacio al mismo)
- Inyectores de GLP. Se añaden inyectores específicos para GLP en el motor para controlar la cantidad de gas que entra en los cilindros.
- Unidad de Control Electrónico (ECU). Se instala una ECU que gestiona la inyección de GLP y la mezcla con el combustible. Esta unidad ajusta automáticamente la proporción de GLP y diésel según las condiciones de conducción.
- Tuberías y válvulas de seguridad. Se instalan tuberías y válvulas para asegurar un suministro seguro de GLP al motor.
Una vez instalado el sistema, se realizan ajustes y calibraciones para optimizar el rendimiento del motor y garantizar la seguridad del sistema. Después, el vehículo debe pasar la ITV para asegurarse de cumplir con las normativas de seguridad y emisiones. Además, se debe actualizar la documentación del vehículo para reflejar la conversión a GLP.
La microhibridación es mucho más sencilla.
¿Cuánta autonomía tiene en carretera?
La autonomía de un vehículo convertido a GLP depende de varios factores, incluyendo el tipo de sistema de conversión, la capacidad del tanque de GLP, el consumo del vehículo y las condiciones de conducción.
En un sistema dual-fuel, el vehículo puede funcionar con una mezcla de diésel y GLP. Este sistema no elimina el uso de diésel, sino que permite al motor utilizar ambos combustibles simultáneamente.
La autonomía después de convertir tu coche a gas varía según estos factores:
Capacidad de los tanques
La autonomía se incrementa debido a la presencia de dos fuentes de combustible. El vehículo puede seguir utilizando su depósito original junto con el nuevo tanque de GLP instalado.
Consumo de GLP y combustible
Durante el funcionamiento en modo dual-fuel, el consumo de combustible se reduce significativamente, ya que una parte de éste es reemplazada por GLP. Esto puede hacer que tengamos un ahorro de combustible de entre el 40% y el 60%.
Autonomía combinada
La autonomía total se calcula sumando la distancia que el vehículo puede recorrer con el combustible y con el GLP. Por ejemplo, si un vehículo tiene una autonomía de 600 km con diésel y se añade un tanque de GLP que proporciona 300 km adicionales, la autonomía combinada sería de aproximadamente 900 km.
La conversión de un coche térmico a GLP con un sistema dual-fuel puede ofrecer una autonomía mejorada, combinando las ventajas de ambos combustibles, considerando la inversión alta para modificar el coche a GLP.
¿Cuánta autonomía tiene en carretera?
La autonomía de un vehículo convertido a GLP depende de varios factores, incluyendo el tipo de sistema de conversión, la capacidad del tanque de GLP, el consumo del vehículo y las condiciones de conducción.
En un sistema dual-fuel, el vehículo puede funcionar con una mezcla de diésel y GLP. Este sistema no elimina el uso de diésel, sino que permite al motor utilizar ambos combustibles simultáneamente.
La autonomía después de convertir tu coche a gas varía según estos factores:
Capacidad de los tanques.
La autonomía se incrementa debido a la presencia de dos fuentes de combustible. El vehículo puede seguir utilizando su depósito original junto con el nuevo tanque de GLP instalado.
Consumo de GLP y combustible.
Durante el funcionamiento en modo dual-fuel, el consumo de combustible se reduce significativamente, ya que una parte de éste es reemplazada por GLP. Esto puede hacer que tengamos un ahorro de combustible de entre el 40% y el 60%.
Autonomía combinada.
La autonomía total se calcula sumando la distancia que el vehículo puede recorrer con el combustible y con el GLP. Por ejemplo, si un vehículo tiene una autonomía de 600 km con diésel y se añade un tanque de GLP que proporciona 300 km adicionales, la autonomía combinada sería de aproximadamente 900 km.
La conversión de un coche térmico a GLP con un sistema dual-fuel puede ofrecer una autonomía mejorada, combinando las ventajas de ambos combustibles, considerando la inversión alta para modificar el coche a GLP.
Desventajas de convertir tu coche a GLP
Si bien convertir cochea GLP tiene ventajas, también existen numerosas desventajas que es importante tener en cuenta antes de tomar una decisión, teniendo en mente que existen otras alternativas más económicas, como la microhibridación que tan buenos resultados nos está dando.
- Gastos de instalación. La conversión a GLP requiere la instalación de un sistema adicional que incluye un tanque de GLP, inyectores, una unidad de control electrónico, entre otros componentes, haciendo que sea bastante costoso.
- Recuperación de la inversión. Dependiendo del uso del vehículo y el precio del GLP, tardaremos varios años en amortizar la inversión inicial.
- Menos espacio de carga. El tanque de GLP suele instalarse en el maletero del vehículo, lo que reduce el espacio disponible para cargar equipaje o mercancías.
- Disponibilidad de estaciones de GLP. Aunque el número de estaciones de servicio de GLP está creciendo, todavía puede ser limitado en algunas zonas, esto puede complicar los viajes largos o rutas menos frecuentadas.
- Mantenimiento y reparaciones. No todos los talleres mecánicos pueden realizar el mantenimiento y reparaciones de sistemas de GLP y las piezas específicas del sistema pueden no estar fácilmente disponibles, lo que genera retrasos en las reparaciones.
- Aumento de peso. La instalación del tanque de GLP y otros componentes añade peso extra al vehículo, lo que afecta al rendimiento y la eficiencia del vehículo
- Reducción de potencia. En algunos casos, el uso de GLP puede reducir la potencia del motor.
- Compatibilidad del motor. No todos los motores son compatibles con la conversión a GLP. En algunos motores, la conversión puede no ser viable o puede causar problemas mecánicos a largo plazo.
Antes de tomar una decisión, es recomendable consultar con especialistas en conversiones a GLP y realizar un análisis detallado de los beneficios y desventajas en función de tus necesidades específicas y patrones de uso del vehículo.
No todos los coches diésel o gasolina adaptados a GLP van a obtener la etiqueta ECO
La etiqueta ECO en España es una clasificación otorgada por la Dirección General de Tráfico (DGT) que identifica a los vehículos con menores emisiones contaminantes y mayor eficiencia energética. Aunque convertir un coche diésel o gasolina a GLP puede reducir sus emisiones, no todos los vehículos adaptados a GLP automáticamente obtendrán la etiqueta ECO.
Para obtener la etiqueta ECO, tras convertir coche gasoil a gas, el coche debe cumplir con las normas de emisiones Euro 4, 5 o 6 en el caso de gasolina, y Euro 6 para los diésel.
Si el vehículo, después de la conversión diésel a GLP, no cumple con las normas Euro requeridas, no será apto para la etiqueta ECO.
Los vehículos más antiguos pueden no cumplir con las normas de emisiones necesarias, incluso después de la conversión a GLP. Por ejemplo, un coche diésel anterior a la normativa Euro 6 o un coche de gasolina anterior a Euro 4 no obtendrán la etiqueta ECO.
Es fundamental asegurarse que la conversión esté certificada adecuadamente.
Contacto a conversión por microhibridación
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